Después de haber escrito casi 500
crónicas en esta columna sobre los restaurantes de Santa Cruz y otros, creo
tener clara cuál es la idea que quiere el cruceño de sus restaurantes
preferidos. Lo podría resumir en una línea; Las churrasquerías.
Pero como muy bien saben mis
lectores no es precisamente de los restaurantes de carne de los que hablo aquí,
sino del restaurante en el sentido amplio de la palabra, por eso hoy voy a
buscar perfiles característicos de restaurantes para 2018.
Curioso al cruceño en general le
gusta los restaurantes ruidosos, que tengan bulla y griterío, para el cruceño
esto define a los restaurantes con clientela y si hay gente que ¡Viva Vicente!.
Así restaurantes como Sacha, La Cabrera o Pedro del Brete buena comida y
decibelios altos.
Les gusta aquellos donde uno es
visto y al ser reconocido en este local se pueda decir a este le van bien las
cosas y así delimitar su clase social, como Piegari, Jardines de Asia o el
Arriero o Los Hierros, para ver y ser
visto.
Al cruceño le gusta de vez en
cuando comer paella y desde que la Castañuela de Mochila desapareció del mapa,
destacan en este sector La casa de la paella, Zanella o Terra y mar.
Y de perfil elegante solitario y
de buen comer más para que no te vean, City Bistro, La Octava en Urubó, o Manolito
el español.
O bien el perfil gastro-Bar con
Oak, Chera o Montreal un buen lugar para la tertulia, las copas post cena y
conversación
Y el perfil del sol naciente que
tan de moda se ha puesto en nuestra ciudad con más de 75 restaurantes como
Sushi Flash, Shinko al que se ha
apuntado Inés España.
Y hablando de el perfil italiano aquí
sobresale los 30 años de Michelangelo, Angelino y Bravísimo
Y los que saben a los que quieren
un perfil al nivel de las estrellas, no hay como compartir baraja entre Dossier
y La Suisse
Y no les hablo de la gastronomía de
los nuevos Hoteles del Hampton en las nubes o el recién Marriot, y de la plaza Gastronómica
de “Beauty” que acaban de abrir y no he probado bocado.