viernes, 20 de noviembre de 2015

CRONICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA


Parafraseando a García Márquez podríamos decir que “Cheruje I” ha sido la crónica de una muerte anunciada. “Ha muerto el rey viva el rey” terminó “Cheruje I” viva “Cheruje II”.
Como dijimos en “Asuntos pendientes” en Radio de El Deber, no soy profeta ni hijo de profeta, pero nos atrevimos a profetizar que  “Cheruje I” iba ser un éxito y así lo ha sido, lastima de la falta de fe de sus organizadores que pensaron en chico y este proyecto que está llamado a ser grande… muy grande.
En primer lugar felicidades a la gente de Gastrocruz especialmente a Cecilia, MarKus, Jorge, Ricardo y el largo etc. de profesionales que componen esta magnífica asociación gastronómica cruceña, que han plantado la semilla de lo que será en un futuro la gran Feria gastronómica de Santa Cruz y que todos esperamos.
“Cheruje” ha nacido en Noviembre y en un garaje, como nacen los grandes proyectos, así nació Apple, Microsoft, Google, Disney o Amazon. Este mercado gastronómico de Santa Cruz donde como dice el refrán del evento “donde comemos de todo” ha sido un éxito; y  ha muerto de éxito y dentro de seis meses tiene que renacer, para estar entre las grandes citas gastronómicas de Latinoamérica. Sólo es cuestión de fe.
Si “Miztura” es lo que es, “Cheruje” será lo que tiene que ser, pues tenemos materia prima – y no me refiero a los súper alimentos bolivianos que también empujaron en este proyecto- me refiero a la calidad y cantidad de chef jóvenes y con proyección súper innovadora, creativa y profesional de los fogones, que tenemos en nuestra tierra. Por eso no dudo, que estamos ya hablando de uno de los grandes eventos de futuro.
La verdad que de esta primera edición de “Cheruje” puedo decir más bien poco, llegue a las 13:30 y casi todo estaba agotado, hasta los tickets, las más de 100 raciones multiplicadas por los 25 stands de los restaurantes participantes se fulminaron en menos de dos horas, solo alcance al último taco de chancho del catering de Silvia Galacho y al chancho al barro del restaurante Dossier. Al pisar el coqueto stand de La Suisse mi amigo Roberto me decía que acaba de servir su última ración. Eso si no sé de dónde me sacaron una ración de Quinoa buenísima que me comí lamentándome no haber llegado antes.

Lo que no falto fue la nueva cerveza Prost y los vinos de Campos de Solana el Risling y el Rose bien fríos bajaban por la garganta como agua de los manantiales de Huaina Potosí en la tórrida canícula cruceña, Poca cosa más, desde un  punto de vista gastronómico, “Cheruje I “murió de éxito, viva “Cheruje II”.

EN PAPEL PRENSA


jueves, 12 de noviembre de 2015

ESTOY "FLASHEADO"


He quedado “flasheado” pues en mi recuento estadístico de restaurantes y similares me he encontrado en Santa Cruz, más de 25 locales tienen como estrella el “sushi”. Bien es verdad que nuestra ciudad cuenta desde hace cien años con una colonia japonesa importante. Pero de ahí a que el sushi le esté haciendo sombra al majao, no lo esperaba.
He quedado “flasheado” por la calidad del sushi en nuestra ciudad, desde aquel pequeño local, que ya no existe, cerca del palacio de justicia que hace más de 15 años y de nombre “Nagasaki”, al legendario “Yorimichi”,  “Koi” …“Ken” o en el centro cultural japonés de la Beni “Sarai”, siempre en estos locales el sushi rebosa calidad de origen.
Con la llegada de los “Nikei” o pobladores japoneses peruanos, el sushi se extiende por otros rincones y locales como Jardín de Asía, Hanzo,  Nikei sushi bar en la San Martín. Y no sólo los peruanos, sino argentinos con “Miau”, coreanos con “Ichiban”, cochabambinos con  “Goss” y un largo etc. de sushis… tren, manía y de mercado como en “Los pozos”.
Todos buenísimos, todos acertadísimos unos más cerca del original que otros. Pero donde de verdad he quedado realmente “flasheado”, por la calidad, variedad, rapidez y precio, ha sido este atrevido local de “delivery”  que lleva por nombre “Sushiflash” en la calle perpendicular de la Monseñor frente a “Olé”.
Donde además de repartir, se han atrevido a poner cuatro mesitas y allí mismo reparten el sushi a diestro y a siniestro y como el precio es asequible después de una bandeja viene otra. El secreto: un chef peruano de lo mejor, originalidad e innovación en las salsas y buen precio y rapidez; esto es lo que compone la iniciativa “sushiflash” de jóvenes empresarios cruceños.
Allí podés probar desde rolls al estilo mar y tierra, rellenos de salmón furay y palta que no falte, o relleno de langostino con salsa acevichada, o un roll de pepino y atún o el roll a la italiana bologna que te sorprenderá, frios o calientes. Además tenés todo tipo de makis y nigiris. Pero cuando quede de verdad “flasheado” es al probar el sushi “Hot Gueisha” y las frituras de camarón y calamar con la salsa mayocuya… se lo recomiendo.

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viernes, 6 de noviembre de 2015

5 REGLAS DE ORO


¿Por qué? Cuando hablas con los Chef y los dueños de los restaurantes todos tienen claro sobre el papel cuales son las claves de triunfo en el sector y luego no lo cumplen. La razón no la sé, pero si le puedo dar las 5 claves, ellos me las han contado.
1.- Ofrecer más que una cena o               almuerzo, una experiencia para todos los sentidos. La comida entra en primer lugar por la vista. Así que hay que cuidar todos los detalles visuales, incluso los que no son gastronómicos. Buscamos vajillas originales, mantelería de hijo, decoración de la mesa…etc. La cocina ya no está solo en la cocina, sino en la mesa y la sala.
2.- Otra clave es la creatividad e innovación, salvo los devoradores de churrasco, la mayoría de clientes de los restaurantes, les gusta ser sorprendidos con nuevos platos. Aconsejo formar un equipo de creatividad para proponer propuestas según lo deseos que se van escuchando en sala.
3.- Hacer con algunos platos algo, que no sea solo recreo de la vista y del gusto, sino que también intervenga el tacto: un plato lúdico, que el comensal tenga que completar por él mismo. Estos platillos deben ser entradas que de cortesía y sirven para demorar la espera del pedido. Por ejemplo dejar unos tomates unas rebanadas de pan tostado aceita sal y ajo y que el cliente aderece  él mismo el famoso “Pan con tomate catalán”.
4.- Tenemos que empezar a hablar en cada plato de “su concepto”; qué esconde el palto, no en cuanto a qué alimentos contiene, sino conceptualmente que aporta el plato en cuanto al bienestar, salud y otros factores. Hay cartas que ya indican si el plato es para diabéticos, celiacos o señala las calorías. Una carta así vale un imperio.
5.- Y la última regla, tendría que ser la primera, pues si hay calidad en cocina, experiencia, innovación, aspecto lúdico y concepto y no tenemos los tiempos bien medidos todo se va al traste. Por tanto desde que el mesero levanta el pedido hasta que se sirve el plato solamente tienen que pasar 20 minutos, de lo contrario el estómago del cliente empieza a revelarse y todo lo que antes era glamuroso y riquísimo, es odiado para siempre.
Y recuerde todo con agua o vino, no me fastidie sus platos endulzando sus papilas con gases y azucares.

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