Con la crisis venezolana a
cuestas, una familia de músicos de este país, puso rumbo a Santa Cruz, abrieron
en el Urubó un restaurante a los pies del Hotel Radisson, un día quisieron
cambiar de aires y se establecieron en Equipetrol en un lugar emblemático donde
“Candelabro” cerró sus puertas.
Se dijeron a sí mismos, si a
ellos les fue bien en este rincón de la calle 7 de Equipetrol, a nosotros no
nos puede ir mal, compraron el “Candelabro” y ahora han abierto una remodelada
“Octava” un restaurante para estar a gusto, conversar y disfrutar de una buena
comida sin prisa y con devoción, en un lugar seductor.
Decía una vez “Que bien se esta
cuando se esta bien” y no lo digo por mi compañía pues yo hubiera estado en
medio del desierto del Sahara con la persona que más quiero, seguiría estando
bien. Lo digo, sin lugar a dudas por este nuevo local en Santa Cruz.
En este restaurante de “La
Octava” sus mentores, ha sabido recoger algunas decoraciones de su antiguo
aposento y plasmar una nueva decoración donde resalta la elegancia, la
modernidad, la armonía y por su tenaz diseño.
Así pues, en esta trilogía
gastronómica que presenta “La octava” con su carta, por un lado lo tradicional en los platos
de fondo, luego los montaditos hasta
seis deliciosos finos y atractivos en la vista y en lo que es más importante,
en el paladar como el montadito de brie con morrón o el de langostinos
tropicales. Y si el montadito no es tu agrado puede apostar por las tapas.
En tapas podemos pedir las “Arepitas
de Caracas”, el “pulpo verde” o el tradicional “pulpo a la Gallega” que es el más
solicitado, los que lo prueban, repiten.
En platos principales, apueste
por los que quieran, todos a gran nivel, como el “salmón magro” todo tipo de pasta carnes y pescado,
hay también platos típicos venezolanos como “el asado negro”, o “la pasta cítrica
con langostinos”.
Y cuando terminas, no te quieres marchar,
pues es un sitio seductor para comer bien, beber mejor, y mear y no echar gota, si no me entiende
entre en el baño y lo comprenderá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario